Hacía tiempo que tenía ganas de cambiar de teclado para mi Mac, y finalmente me he decido por el Apple Wireless Keyboard.
El teclado es pequeño y no tiene teclado numérico como suele ser habitual en los teclados de escritorio. En este caso es reducido, como el de un portátil.
Funciona con 3 pilas y la configuración es muy sencilla. Simplemente encenderlo, encadenarlo al Mac vía bluetooth y a trabajar.
Como mola. Menudo adelanto de Papá Noel.